La verdad es que no sé por dónde
empezar. Me asaltaron muchos fantasmas. Dificultades metodológicas que
estuvieron a punto de acabar con mi psiquis. Incluso pasé alguna noche pensando
en por qué pierdo el tiempo en estas cuestiones en vez de salir a hacer cámaras
ocultas o cosas más banales, divertidas e incluso…lucrativas.
Pero algo me atrapa de la
dificultad. En otro post ahondaré en este enigmático asunto.
Intentaré ser
sintético e ir al grano. Quería contarles cómo había terminado todo este asunto
de encontrar cifras sobre la privacidad en el marco del
IV
Taller de periodismo de datos de Medialab Prado (gracias Graeme Herbert por
la parte técnica e Inés Mazarrasa por las correcciones del texto y tus
opiniones, también a la periodista Yolanda Quintana por pasarme algún contacto
interesante). He aprendido mucho aunque no en la dirección que pensaba. Supongo
que en eso consiste: si todo sucediera como esperamos entonces no habría
aprendizaje ¿no?
Bueno, les cuento.
Este último fin de semana hemos
estado cerrando los proyectos. Y varias cuestiones tengo que comentar. La
búsqueda de datos no mejoró. Es decir, esperaba encontrar más apoyo en este
aspecto y me di cuenta de que la gente está más perdida que yo. Especulamos sobre
las razones. Leímos. Nos documentamos. Y nos dimos cuenta de muchas cosas. Hay
demasiada información sobre el tema dando vuelta por allí. Todo el mundo parece
hablar de ello pero cuando rascás un poco, vez la realidad: no tenemos cifras
concretas. Ya lo he dicho y me reiteraré. Fueron unos meses de aprendizaje pero
en otro sentido. He podido constatar que las estadísticas en España son
incompletas. Y he ahondado en algunos conceptos que ya sospechábamos.
La web, como verá el lector, está
dividida en varias secciones. Algunas tienen datos y otras son de análisis. Por
ejemplo, en
Consumo y
responsabilidad, hablamos del escaso interés de los consumidores por
proteger o controlar su propia información. Hablamos con expertos, consultamos
encuestas y parece que la conclusión es clara: al consumidor le importa un
carajo el asunto. En
Cifras
cojas, nos metemos de lleno en un terreno fangoso. El de los datos. ¿La
conclusión? Que no hay estadísticas fiables en España sobre cómo se está vulnerando este derecho. Sabemos
que algo está pasando. Oímos voces, casos, anécdotas de color pero no somos
capaces de ponerle números al tema. De eso hablamos en esta sección. Y de la
necesidad de hacer un doctorado en protección de datos para comprender estos números.
Luego, viene la joya: la
entrevista
que hicimos a Ricard Martinez, experto en privacidad. La recomiendo
especialmente porque el entrevistado aúna dos condiciones fascinantes:
controlar el tema en cuestión y saber divulgarlo. Eso hace que la entrevista
sea entretenida y al mismo tiempo podamos hablar de un tema serio apelando a la
vida cotidiana. Hablamos de las empresas, del gobierno, de los colegios, de los
menores. Imperdible.
Luego, en
Escéptico
empedernido hemos querido convencer con una suerte de preguntas frecuentes
a aquel que “se la trae al pairo” todo este tema. Queremos evangelizar un poco,
lo reconozco. Y a través de preguntas facilonas esperamos acercar un tema
complejo a la ciudadanía.
Recomiendo especialmente también el
Glosario,
con los términos que se han ido usando a lo largo de todo el sitio. Es una
buena manera de documentarse de forma somera sobre cuestiones algunas más técnicas
y otras más históricas como el origen de la privacidad y temas de derecho,
economía e incluso, filosofía.
Estoy medianamente conforme con
el resultado. Principalmente porque he aprendido varias cosas. Por ejemplo, que
las cifras no reflejan la realidad ni de cerca.
Este proyecto es un punto de
partida para muchas cosas más que iré desarrollando en este blog.
Les pido que dejen sus comentarios
al final de este artículo. Me interesa tener un feedback del lector y conocer también
sus puntos de vista sobre el tema. A menudo esta es una cuestión que toca
muchas fibras y es importante escuchar a todas las partes.
Por último, llega el fin de año y
toca beber y comer en exceso. A parte de brindar con cava, guárdese un brindis
con vermuth fresquito de Reus. Me interesa que lo haga porque sé que
disfrutará. Reemplace las olivas por un maravilloso panettone trufado de pasas
de uvas. Su aroma, imperdible.
Les deseo unas hermosas fiestas.
Está lloviendo pero le pido que
por favor no salga con paragua que es una insensatez existiendo las capuchas. (Los canguros no solo estamos para filosofar
sino para dar consejos de vida).
Hasta el año que viene.
Esta vez he aprendido que se
puede contar una historia. Un relato interesante y entretenido.
Con o sin datos.
¡Salut!
Etiquetas: Alessandro Acquisti, consumidor, periodismo de datos, privacidad, protección de datos, Ricard Martínez